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26 de febrero de 2010

Cine y series: un poco de todo (III) -en breve-

Ryan Bingham es un ser desapegado de todo y todos. Su vida se desarrolla entre aeropuertos y hoteles –300 días al año fuera de casa así lo acreditan y su trabajo, en una fantástica época de bonanza económica como la que nos ocupa, consiste en efectuar "recortes de personal". Horrible, ¿verdad? No para él: de cada habitación hace un hogar y del despido un arte. Aunque la premisa es llamativa y original, me llevé una impresión amarga de Juno, la anterior película de Jason Reitman. Pero las buenas críticas y que Clooney siempre cumple fueron baza suficiente para cambiar de idea... y así disfrutar de Up in the Air, una buena película sobre un tipo peculiar con una filosofía de vida igualmente peculiar que será puesta a prueba. Lo bueno de la película es que no juzga, simplemente muestra, y ofrece diferentes puntos de vista sobre los temas que trata: a cada cual le corresponde decidir con qué se queda. Es candidata a mejor película, director, guión adaptado, actor y actrices secundarias (Vera Farmiga y la "crepuscular" Anna Kendrick) en los próximos Oscar. Aunque este año la competencia es dura, no sería de extrañar que algo se llevara.

En la medida de lo posible, procuro ver las películas candidatas a las "categorías importantes", pero esta vez me han faltado varias (la crisis...;p). La próxima quizá sea An education, de la que no hacen más que cantar maravillas de su actriz protagonista. Ya que hablamos de premios, saltamos a los Goya del año pasado y Pagafantas. Esta también habla de filosofías de vida... en cachondeo, claro. La verdad es que esperaba más de una película humorística de eternos perdedores en el terreno sentimental, pero confieso que me reí con las metáforas del reino animal (¿quién no conoce "la cobra" o "culebrilla"?XD) y me pareció una película... cómo decirlo... con mensaje ;> La secuencia final, por cierto, impagable. Ah, y aunque tenga que ver demasiado de refilón, la excusa sirve para enlazar este vídeo desternillante ("¡Contigo no, bicho!" XD).

Impagable, aunque por otras razones, también es Lost. Tranquilos, que no vuelvo a la carga para rajar de ella. Al contrario: el cuarto capítulo, "The substitute", fue grande gracias al gran Terry O'Quinn. Como se viene comentando por la blogosfera, lo jodido es que tras la cantidad de animaladas que nos han endosado sin dejar tiempo para digerir, la serie se ha rodeado de un aura en la que parece que todo vale... La conclusión es que la saturación de sorpresa ha degenerado en la ausencia de ésta. ¿Qué puede superar a una isla que salta en el espacio y en el tiempo? (por poner el ejemplo más bizarro que recuerdo). Si ahora dijeran que Claire es la encarnación de la virgen y Aaron el nuevo Mesías me traería sin cuidado. Vaya, al final he terminado despotricando… XD.

Para acabar, quería comentaros que acaban de darse a conocer los finalistas del concurso de diseño de la carpeta UB 2010-2011. Han tumbado mi diseño por segundo año consecutivo (podéis verlo en detalle pulsando sobre la imagen). Esto del diseño gráfico es una cuestión bastante subjetiva, pero el año pasado me dolió no estar entre los finalistas visto el lamentable nivel (la ganadora, que arrasó en votos, afortunadamente sí estaba bien; a las otras supongo que las votaron sus contactos de Facebook). En esta edición la cosa ha mejorado, aunque confieso tener duras reservas por alguno de los diseños. Pataletas personales y amargura al margen, si sois alumnos de la Universidad de Barcelona podéis votar desde esta página (o curiosear para ver los finalistas de este año y anteriores) y elegir qué llevaremos todo el año que viene bajo el brazo.

¡Saludos!

22 de noviembre de 2009

Cine y series: un poco de todo (II)

Tres semanas sin actualizar el blog. No, no vuelvo a las andadas, simplemente he ido un poco liado y no he hecho nada muy interesante a nivel friki... salvo ver un montón de pilotos de series en busca de herederos para ocupar el trono de "reina de las noches". La búsqueda ha dado sus frutos.

Paso a comentar alfabéticamente todo lo nuevo que he visto, lo que ya estoy viendo y lo que quiero ver.

Californication (en el punto de mira):
Le tengo ganas por el cóctel de sexo, provocación e incorrección política general de la que hace gala ya desde el título (¿homenaje a los Red Hot Chilli Peppers o coincidencia?). Además, Duchovny me gusta y me lo creo de tío pasado de vueltas; será curioso verlo moverse en las antípodas de su famoso Fox Mulder.
Caprica (Piloto)
Me encantó el piloto. Pese a que el jefe del invento sea Ron “hagounosfinalesdemierda” Moore, en el terreno ci-fi fue el adelanto más seductor de la temporada pasada.
Castle (1x06)
¡¡Mil gracias por la recomendación, NeKroLiTe!!;> Me lo estoy pasando bomba desde el primer día con esta serie de escapismo sin pretensiones. Es un procedimental de tomo y lomo que se sustenta casi por completo en el carisma de su protagonista, el escritor que colabora con el FBI Rick Castle, interpretado por un Nathan Fillion en estado de gracia. Precisamente porque adoro al actor (oh, capitán Mal...) y su mera presencia en pantalla sirve para arrancarme una sonrisa, mi opinión vale menos que un duro de madera. Los productores lo saben y el show está claramente enfocado a su lucimiento, si se hubiera llamado "Fillion" en lugar de "Castle"... a nadie le habría importado.
Fringe (en el punto de mira)
¡La serie de Pacey! Eso y las buenas críticas que poco a poco ha ido cosechando tras afianzar sus intenciones son mi principal foco de interés. Eso y meter un poquito más de ci-fi en mi vida, claro ;>
Flashforward (frío, frío...)
Creo que la misma expectativa que la encumbró es lo que la está sacudiendo. Era la niña bonita de la cadena ABC para este año, la heredera moral de "Lost"... demasiado peso en sus hombros. Las críticas son tan duras que me da hasta pereza comenzar con ella.
De lo mejor -de lo que veo- que se está haciendo en televisión. La cuarta temporada ha empezado fuerte, con ganas de llevar a los Taylor a un territorio inexplorado: el del fracaso y el rechazo social. Los nuevos personajes siguen un poco en segundo plano, pero quiero tanto a los de siempre que no me canso de sus traumas y alegrías. Eso sí, pregunta: ¿qué ha sido de Tyra y Lyla? (desaparición a la Santiago, como es habitual en "FNL").
Glee (1x07)
Seré honesto: detesto los musicales. Sin embargo, Glee tiene un punto rarito que ha sabido atraparme por una combinación adecuada de personajes blanquísimos, villanos de opereta, narrativa ágil, situaciones extravagantes pero divertidas, una paleta de colores saturadísimos... como en "Pushing Daisies" pero sin pasarse tres pueblos.
Hasta la fecha, el capítulo que menos me ha gustado es el 1x05, donde la estrella fue Kristin Chenowetz (de "Pushing Daisies", precisamente) como invitada especial. No iba a ninguna parte y dejaba de lado a los verdaderos protagonistas: los miembros del coro y los profesores. Por desgracia, la naturaleza de la serie se presta en exceso a los cameos de buenas voces, que es cuando se parece más a un musical que a una serie. Si eso acaba ocurriendo (o si cantan mucho más de lo que lo hacen), me perderán como espectador... a menos que Nathan Fillion sepa cantar y lo inviten a él ;p Por ahora, sin embargo, es un valor seguro: ¡Glee!
Gossip Girl (1x03)
Definida en muchos sitios como "placer culpable", no es ni más menos que un "Melrose Place" en versión pija, adolescente y cargada de clichés sin matices. Pasan tantas cosas por capítulo y son tan exageradas que me la imagino saltando el tiburon en menos de dos temporadas; por otra parte, el salto del tiburón es la misma esencia del show... Se deja ver y entretiene, pero no me remueve nada por dentro. La tengo en stand-by, otras cosas le pasan delante.
Barney... wait for it... Stinson! Esa es casi mi razón principal para ver este show. Por eso, los que la llevéis al día entenderéis por qué tras el 5x07 soy feliz de nuevo: "daddy's back" ;> Robin y Ted me gustan, a Marshall lo tolero y con Lily no puedo (no, no veía Buffy y en "American Pie" no me caló tanto). Es una serie razonablemente divertida, pero cuando los capítulos son buenos, son MUY buenos... son awesome!!
Desde el instante en que Richard y Kahlan se miran al conocerse, tras diez minutos exactos de capítulo, sabes que se amarán y su pasión superará adversidades y fronteras, separará océanos y vencerá al mal. Eh, y con una simple ojeadita. Creo que me he hecho mayor para historias de elegidos y amores predestinados; al menos así, tan de cara, tan para todos los públicos. Por otra parte, en fanvids de la serie he visto momentos dramáticos y algún personaje que parece interesante. No sé, quizá se oscurezca a medida que avanza la trama, pero por ahora... va a ser que no. Hay que reconocerle, sin embargo, que la belleza de los escenarios naturales de Australia quita el aliento.
Lie to me (Piloto)
Cal Lightman (Tim Roth) dirige un grupo de profesionales especializado en detectar cuando alguien está mintiendo, por lo que sus servicios son reclamados a menudo por el FBI como segunda opinión. Los procedimentales suelen gustarme al principio pero termino por cansarme de ellos ("House" incluido), especialmente si no desarrollan subtramas que hagan evolucionar en algo a los personajes, como he leído que es el caso. Lo que más me gustó del piloto es que la brújula moral de Cal está algo averiada, y que no se quedan en descifrar si alguien miente o no, sino que desarrollan y cuestionan qué se hace después con esa información.
El piloto no tuvo nada malo... ni tampoco nada especialmente bueno. Es un procedimental correcto, sin más. Queda en stand-by, pero si alguna de las habituales cae me acordaré de ella.
Lost (calentando motores para la S6...)
¡Última temporada de la serie que cambió los cánones de la televisión! La trama no soporta más giros de tuerca -no si quieren que los sigamos con atención e interés-, así que lo mejor es que por fin se acaba, que pondrán un punto y final a tanta paranoia sin sentido... cuyos creadores aseguran que sí tendrá sentido. Me encantará comprobarlo, pero en realidad ya me da igual; si sigo ahí es por los personajes.
Merlin (calentando motores para la S2...)
Aquí tenemos la revisión juvenil del mito artúrico y la amistad del futuro rey de Camelot con el mago más poderoso de todos los tiempos. Una nueva apuesta para todos los públicos, en la misma línea pero con mil veces más gracia que ese esperpento llamado "Robin Hood". Merlin es encantador y Arturo clava su chulito de buen corazón; todos los demás cumplen estupendamente con sus papeles. Aunque las situaciones siempre se resuelvan de forma limpia, al menos se arriesgan y proponen temas y conflictos interesantes. En casi cada capítulo maldigo su blancura y me da rabia que no expriman el potencial adulto que tiene –sin que eso interfiera en una narrativa fluida y en tensiones bien resueltas–, por eso prefiero ver la temporada de un tirón y no pasarme una semana criticando el tipo de público al que va dirigida por franja horaria.
Modern Family (Piloto)
La comedia de moda en USA narra las peripecias de tres familias: Jay y Gloria llevan seis meses casados y él es casi treinta años mayor que ella, que además tiene un hijo de once años, Manny, de un matrimonio anterior; Mitchell y Cameron son homosexuales y acaban de adoptar un bebé; Phil y Claire tienen tres hijos que los torean como quieren, especialmente a él, que se cree un padre “guay”. El punto de partida argumental no innova, pero está rodada como un documental y su fuerza radica, cómo no, en los diálogos: en el piloto, tenemos las perlas que suelta Jay cada dos por tres, las payasadas de Phil o el genial “momento Rey León”. Por ahora le he hecho un hueco en mi parrilla, a ver qué tal evoluciona.
Skins (en el punto de mira)
Tengo una rabia irracional hacia el producto televisivo patrio. Sin embargo, confieso ver con gusto “Física o Química”; es divertida y llega a donde otras no se atreven ni a asomar la nariz. Por lo que poco que sé de “Skins”, es el “FoQ” extranjero que ya tiene tres temporadas (de diez capítulos) y se habla bien de ella por los foros. ¿Alguien puede darme más referencias?
Sons of Anarchy (Piloto)
Llegó a mis oídos como la serie que satisfaría los deseos de los seguidores de la mayor obra maestra jamás parida que es “The Shield” y eso, señoras y señores, es mucho decir. Pertenece a la misma cadena, FX, y ha sido creada por uno de los productores de “The Shield”. Acogida excelente de crítica y público, calificada de shakesperiana por su intensidad dramática, etc. Tras el piloto, tan solo puedo decir que las hazañas de la banda de motoristas conocida como “Sons of Anarchy” en el pueblo de Charming apuntan buenas maneras. Estoy a la ansiosa espera de más.
Stargate Universe (frío, frío)
Me gustó la película del 94 pero no he visto ninguna de las series de la franquicia. “Stargate Universe” se concibió como la serie para la gente que no sabe nada de Stargate y toda su historia previa, cosa que me atraía porque no iba a patearme las 10 temporadas de la SG-1 y las 5 de Atlantis para entender esta –por muy buena que dijesen que era–. Siguiendo con los referentes hereditarios, en este caso era ni más ni menos que “Battlestar Galactica”, ni que fuese por su estética y sus temas más adultos. Llevan 9 capítulos y comentan que no acaba de arrancar, que las mujeres son todas floreros y, lo peor de todo, que aburre. Si la cosa cambia, avisadme.
Supernatural (Piloto)
Que Onari sea mega-fan de SPN fue el principal motivo para acercarme a su piloto. Me esperaba algo terrorífico, en plan “Embrujadas”, pues se la vinculaba a esa liga… y no tengo la menor idea de por qué. Lo que me encontré fue un show con buena producción, actores con química y carisma (sobre todo Dean… sorry, Padalecki ;p), diálogos chispeantes; en definitiva, un producto más que digno al que la crítica ha puesto por las nubes en su cuarta temporada. Una cosa que me encanta del show es que está completamente volcado en los aficionados, se presta a todo tipo de bromas y está abierto a cualquier cosa que lo haga más atractivo. En su contra, me pesa que lleve 90 capítulos de 45 minutos a sus espaldas… pero se va a intentar ;>
A ver, qué puedo decir de TBBT… ah, ¿que solo puedo usar una palabra? Ok, tampoco es tan difícil: brillante. Sheldon Cooper es el puto amo y los demás pululan a su alrededor como los secundarios involuntarios que son. Referencias a Star Trek, Star Wars, rol, videojuegos, comics... Si eres un friki y estás orgulloso de serlo, esta es tu serie.
The Office (6x08)
Es una serie difícil que ha corrompido parte de su encanto original para gustar al gran público, y quizá no le haya sentado mal. Al principio era tan bestia, tan incómoda de ver, Michael era tan machacón, y tantas cosas más, que cada capítulo podía ser el último. Esta es mi opinión, claro. Del mismo modo que cuando “How I met your mother” brilla, su luz te ciega; cuando “The Office” es mala, es capaz de agotar tu paciencia pese a durar solo 21 minutos -su corta duración es un factor esencial para que resista en mi parrilla-. El día que finalice solo echaré de menos a algunos de los freaks que pueblan Dunder Mifflin (Dwight es muy grande y el surrealismo de Creed, poco pródigo, no tiene precio ;>).
The Prisoner (en el punto de mira)
Remake de la serie de los 60 pasada a miniserie de seis capítulos. James Caviezel no me convence como protagonista, pero estoy deseoso de ver a Ian McKellen como “Número 2”. La idea me recuerda vagamente a “El show de Truman”… pero con espías. ¿Extraña combinación, verdad? No he visto la serie original, así que todo me vendrá de nuevo.
The Vampire Diaries (frío, frío)
La sombra de “Crepúsculo” es alargada. Si bien Nina me dio esperanzas al tener más neuronas que Bella, Stefan me aburrió con una nueva encarnación de Edward, “el vampiro bueno”. No esperaba nada y no me aportó nada. Podría seguir viéndola pero, habiendo como hay otras cosas para probar de calidad en apariencia superior, de momento se va a quedar indefinidamente en el cajón.
The Wire + Deadwood (calentando motores para las S2 y S3, respectivamente…)
Os habréis fijado en que la cantidad de comedias que hay en la lista es elevada. Las veo porque duran veinte minutos y por una necesidad creciente de desconectar y pasar un buen rato. La primera temporada de “The Wire” y las dos primeras de “Deadwood” me encantaron; no obstante, su disfrute precisa de un nivel de atención que ahora mismo no tengo… además de que sus episodios duran cincuenta minutos. En cuanto baje la presión del “real world” me pongo con ellas.
V 2009 (Piloto)
¡Los lagartos han vuelto! El piloto estuvo bien, sin grandes sorpresas ni grandes descalabros. Me pareció acertado que fueran al grano; al fin y al cabo, todos sabemos ya lo que va a pasar. Siendo una re-imagined series como en su día lo fue “BSG”, lo mejor es que muestren las cartas cuanto antes y desarrolle su propia personalidad al margen de la serie original. A este respecto se ha criticado que los personajes son planos o no son interesantes… ya se verá, aunque es innegable que si hubiera que elegir un punto fuerte del piloto no sería ese. Lo que me ha parecido raro es el símbolo de “V”, que en los 80 era el símbolo de la resistencia y ahora es todo lo contrario, de adoración a los visitantes. He preferido mantenerme ajeno a los comentarios de la red que buscan un mensaje político en este show (con paralelismos entre los lagartos… ¡y Obama!), por ahora lo veré en clave de entretenimiento ci-fi, esperando que madure y con suerte ofrezca algo más.
Hasta aquí la reseña de series. ¿Sugerencias, comentarios? En cuanto a películas ando más vago, pero "Luna nueva" está al caer.
¡Un saludo a todos!

9 de mayo de 2009

Cine y series: un poco de todo


Ciutadans de Catalunya, ja sóc aquí!;p Me he ausentado más de un mes, pero no por ello he dejado de ver cine y series, faltaría más. ¿Cómo debe ser la vida de alguien que no vaya al cine ni veas series americanas? ¡¿Es eso posible o concebible en modo alguno?! ;p
En cuanto a cine, voy a empezar por Keira Knightley y "La Duquesa". Mira que la actriz es joven, pero a este paso en breve acabaremos confundiendo sus películas de época. En esta ocasión, nos trajo una historia correctamente narrada, interpretada, dirigida y producida...pero totalmente olvidable. Lo más destacable es lo poco atractivo que es Dominic Cooper, el "galán" de la película. No es coña, me quedé con eso y con que Keira estaba extrañamente fea. Sí, resulta obvio que la historia no me atrapó demasiado, ¿no?
Salto a "Déjame entrar", cine sueco fantástico (en serio) que arrasó en Sitges el año pasado. A ver, jamás diría que es mala (ni más ni menos que un 8,2 en Imdb con más de 25000 votos), pero me cuidaría muy mucho de recomendársela a mis conocidos -no quiero que dejen de hablarme-. Un niño de doce años que sufre acoso escolar y se hace amigo de una niña un poco rarita que esconde un oscuro secreto, un entorno nevado y solitario, y un ritmo pausado (bonito eufemismo para no decir "lento") no es algo a lo que el espectador estándar esté habituado.

Que conste que me incluyo claramente en esa categoría de "espectador estándar" y, aunque de vez en cuando veo gafapastadas de bastante nivel -esta lo es parcialmente-, en el fondo lo paso mucho mejor con cosas como... "X-men Orígenes: Lobezno".
Sé que van a lloverme pedradas por decir esto, pero las dos horas de "Déjame entrar" se me hicieron eternas y las de "Lobezno" pasaron como un soplo de brisa fresquita. La peli da exactamente lo que el trailer promete: una historia sencilla pero convincente, una ambición ajustada al producto y muchas ganas por parte de los involucrados; el casting es estupendo. Uno de los personajes que aparece en ella es (¡por fin!) Gambito, interpretado por Taylor Kitsch, solo conocido por interpretar al alcohólico y desastroso Tim Riggins en... “Friday Night Lights”.
Perdón, debería decir la magistral y soberbia “Friday Night Lights”. Esta serie cuenta la historia de un pequeño pueblo de Tejas cuyos habitantes solo tienen una cosa en la cabeza: fútbol americano. A priori hay pocos argumentos menos atrayentes, ¿no? Pues la verdad es que se trata de un genial drama de personajes estupendamente trabajados y, al final, el fútbol americano es lo de menos. Tan solo es una excusa para hablarnos del día a día de este grupo de entrañables personajes y conseguir que realmente nos preocupemos por ellos. Además, cuanta con el matrimonio Taylor, el entrenador y su impresionante mujer (Coach & Mrs Coach ;p), el eje sobre lo que todo gira y un ejemplo narrativo de cómo lograr que el interés no decaiga sin recurrir al puñetero angst. Claro que hay ciertos clichés: el jugador de talento moderado pero esforzado, la súper estrella, la chica problemática, pero están tan bien tratados que da absolutamente lo mismo. Llevan tres temporadas y, salvo un par de experimentos extraños en algunos momentos de la segunda, no sobra ni falta nada y se ha ganado desde ya el tercer puesto en mi podio personal (junto son "The Shield" y "Firefly").
El que haya maravillas como "Friday Night Lights" correteando por ahí evidencia aún más la grandísima decepción que supuso el final de "Battlestar Galactica". Al decir final me refiero tan solo al último capítulo. Podemos plantearnos que, total, un solo capítulo no puede pesar más que los casi ochenta anteriores y sigue siendo una gran serie. También podemos deducir que ese lamentable final sugiere que no tenían ni puta idea de qué nos estaban contando antes. Los pequeños arcos argumentales siempre habían funcionado de maravilla (Pegasus y Cain, New Caprica, el motín, etc.), así que supongo que la serie dio un vuelco a partir de la mitad de la tercera temporada, cuando se comenzaron a tomar demasiado en serio el "destino especial" de Starbuck. Si ya desde un principio nos hablaban de temas como qué significa ser humano y si nuestra raza merece o no sobrevivir (que no son los temas más simples del mundo, precisamente), entonces había que añadir epicidad, misticismo, el destino... Y a partir de ahí lo que nos contaban estaba iba a estar bien o no en función de cómo lo ataran todo... Y lo han atado de pena: incoherencias argumentales, personajes irreconocibles, preguntas sin respuesta o con una respuesta insatisfactoria que da a entender que el equipo de "profesionales" que guioniza no pensó en ello más de diez minutos y que cualquier fan se saca de la chistera algo con mucho más sentido en un par de horas. Habría dedicado una entrada completa al final de BSG, pero no veo qué gracia puede tener leer las quejas de alguien durante diez párrafos. Va a hacer dos meses que acabó y cuanto más lo pienso más me enfado; Cosette aún no lo ha superado -era su serie del alma- y sigue llorando por las esquinas lamentando lo que pudo ser y no fue. Ah, y la genial ilustración de Racetrack que tenéis más arriba es obra del igualmente genial Grant Gould.
De BSG vamos a su teórico spin-off, "Caprica". No es lo que más me apetecía ver y, después del fiasco de Galactica, no tenía ninguna fe en Ron Moore y su gente (con Jane Espenson a la cabeza del equipo de guionistas) pero... ¡qué episodio piloto! Luego la serie irá por donde irá y todo eso, claro; sin embargo, esta primera hora y media ha sido un aperitivo que deja con ganas de más. La serie arranca casi sesenta años de lo acontecido en BSG y aseguran que no tendrá nada que ver. Por ahora es cierto. Hemos conocido a dos familias, los Adams (al menos durante un rato ;p) y los Greystone, y sus diferentes modos de enfrentarse al dolor tras la pérdida de un ser querido. Por supuesto, los guiños a BSG eran constantes. Promete.
Y tras un producto prometedor, la gran decepción del año: "Dollhouse". No la he visto completa, he visto 7 episodios. Suelo conceder 5 capítulos para que una serie "arranque"; es decir, no pido que me enganche y no pueda vivir sin ella, si no que simplemente indique hacia dónde va y muestre un poquito de potencial, de llegar a ser algo con el tiempo (hay muchas series y poco tiempo, así es como hago la criba cuando no hay recomendaciones de por medio). Pues precisamente me dormí con el 5 de "Dollhouse", sin que ninguno de los anteriores tampoco fuese gran cosa. Pero decidí concederle una segunda oportunidad por tratarse de una serie de Joss Whedon, ¡el tío que parió "Firefly"! El 6 mereció la pena y el 7 volvió a ser un bodrio -¡me dormí otra vez!-. Me da mucho palo seguir, en serio... Echo (Eliza Dushku) no me acaba de convencer, parece que le falten tablas; además, los modelitos ridículos que "luce" constantemente ya cansan. Los más dotados logramos comprenderlo con el piloto (los planos de piernas y sujetadores ayudaron): se supone que está muy buena. ¿Acaso el target de esta serie son quinceañeros salidos? ¿Quinceañero y salido no son sinónimos? ¿Algún alma caritativa que haya osado seguir viéndola desea pronunciarse? ¿Merece Joss Whedon la tercera oportunidad que estoy dispuesto a concederle?
¡Y hasta aquí mi retorno! ¡Un saludo a mis queridos cuatro lectores!^^