22 de enero de 2012

"Drive": a real hero, a real human being...

Cuando una película independiente gana en algún festival de renombre, suele empezar una avalancha de recomendaciones que la ponen por las nubes y en boca de todos ―evitaré toda referencia al gafapastismo para explicar por qué me fío entre poco y nada de lo que se premia en Sundance o Cannes―. Drive fue nominada a la Palma de Oro en Cannes y se llevó el premio al mejor director; después triunfó en Sitges (fuera de concurso). Evidentemente, Sitges no es Cannes... es otra cosa. Sitges es friqui. Sitges mola.

Cuando Drive se coló en la cartelera de Sitges, el nombre que me llamó la atención fue el de Bryan Cranston y no el de Ryan Gosling (fans de El diario de Noah, aullad XD). Aunque parecía apetecible, al final Cos y yo la dejamos pasar por horarios y porque en breve llegaría a la cartelera regular. ¡"En breve"! Tres meses después al fin ha aterrizado en España y todo lo que puedo decir es que maldigo el momento en que decidimos esperar: Drive es uno de los diamantes en bruto que 2011 se guardaba para el ocaso.

Sin dar demasiados detalles sobre el argumento, la película gira en torno a un tema clásico como estar en el lugar adecuado en el momento equivocado. También habla sobre hasta dónde somos capaces de llegar para proteger y ayudar a quienes sabemos libres de culpa... Ryan Gosling lleva con elegancia el peso del relato dando vida a un héroe solitario, sin nombre, parco en palabras, que se ve obligado a forzar su código moral para hacer lo que cree correcto. Su interpretación contenida avanza paralela a una narración tranquila, casi contemplativa, y contrasta con estallidos puntuales de violencia descarnada que salpican la pantalla... literalmente.

Ryan "badass" Gosling
Western, noir o cine de acción de los 80, los referentes se mezclan y crean un todo sólido, superior a la simple suma de las partes donde lo bello y lo salvaje se dan la mano; la riqueza plástica de las imágenes es incuestionable. Lograr que la iluminación de un local de strippers o algo tan hortera como una cazadora de nylon con un escorpión dorado bordado en la espalda rezumen glamour está al alcance de pocos. Otro acierto se da en la banda sonora: temas como “Nightcall” o "A real hero" suenan a nostalgia demodé ―aunque se hayan compuesto hoy―, pero en contexto generan una atmósfera sugerente que atrapa desde el primer minuto. 

Drive es una de esas películas que despiertan el interés por toda la gente que la ha hecho posible, desde la novela en que está basada, pasando por su magnífico reparto (los citados Gosling y Cranston, Carey Mulligan, Oscar Isaac, Christina Hendricks, Albert Brooks o el omnipresente Ron Perlman) hasta, por supuesto, su casi desconocido director, Nicolas Winding Refn, cuyo nombre voy a tatuarme en la frente para recordar seguirle la pista… también me tatuaré un escorpión en la espalda, a modo de homenaje :p

Decir que me ha gustado sería redundante, creo. En conclusión: ¡corred a verla! Y si ya lo habéis hecho, ¿qué os ha parecido? ¿Compartís mi pasión por la música ochentera, los bólidos tuneados y las chaquetas de nylon?

¡Saludos!

3 comentarios:

SrRojo dijo...

Me ha encantado tu comentario, y en parte me deprime, porque todo lo que iba a decir en mi blog ya lo has dicho tú, así que me has dejado sin entrada xD

También me interesó por Bryan Cranston principalmente, pero tiene mucho más. Esa atmósfera oscura y ochentera, como muy vacía moral y emocionalmente... me flipa. Y Ryan Gosling se sale, ¡apenas sin hablar! Lo único que no me gustó fueron las ráfagas de violencia, demasiado explícita para mi gusto, algunos momentos me daban demasiado asco y me sacaban de la película.

Voy a darme una vuelta por tu blog, que tiene muy buena pinta. Y te invito a echarle un ojo al mío, claro =D

JM dijo...

¡Bienvenido a The Strike Blog, Sr Rojo!

Después de tanto tiempo (y tan poca actividad), sorprende y gusta que el blog atraiga a nuevos lectores que, además, se animan a escribir en los comentarios: gracias por tus amables palabras ;)

Estamos de acuerdo en prácticamente todo (incluida la música), salvo en algo importante que no he mencionado: la violencia no me molesta; al contrario, me atrae muchísimo en todo su espectro ficticio (pero no la soporto en la vida real). Aquí está rodada de modo contundente, seco, con la adrenalina al límite... y breve. Una persona de temperamento controlado debe estallar de un modo parecido a ese, ¿no? Lo vi pertinente en el marco de la película.

El resto de mi opinión lo dejaré en tu entrada, ya que al final sí te has animado a escribir una ;p Aprovecho para recomendar a los lectores de este blog que se pasen por el tuyo: m2dm, cargado de buenos análisis musicales, tanto novedades como clásicos modernos y, además, cine y series.

¡Saludos, Sr Rojo, y gracias por tu aportación!

Anónimo dijo...

Hola blogeros!
A veces se dice una película es de cine independiente como si fuera despectivo, y en cambio en muchas ocasiones nos encontramos pequeñas maravillas como Drive.
Me ha encantado, aunque pese a que la violencia en el cine no me incomada en absoluto, aquí quizás se abusa un poco.
En fin una excelente película, muy recomendable para una industria en crisis de ideas.
Mamba negra